Las personas que acuden a mi estudio lo hacen por alguno de estos motivos:
- Reducir el dolor (de espalda, o alguna lesión reciente).
- Mejorar su rendimiento deportivo.
- Cambiar su estado físico (perdiendo peso o mejorando su masa muscular), no solo por estética, sino por salud.
- Entrenar durante el embarazo, o recuperación tras el parto.
- Aumentar el grado y nivel de compromiso que requiere quedar a una hora y día determinado.
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A la gran mayoría le resulta difícil comprometerse a acudir a un centro deportivo en el que no se ven atendidos de manera adecuada, se dispone de una amplia franja horaria, y eso consigue al final que se diluyan las motivaciones para el entrenamiento, día tras día.
El entrenamiento se convierte en eso que dejas “para mañana”
Comprometerte conmigo, va a hacer que acudas al entrenamiento, pese a tu jornada de trabajo, y pese a que puedas sentirte cansado. Muchos de mis clientes y clientas entran por la puerta con pocas ganas de entrenar. Vienen con su carga laboral en la espalda. Sin embargo, tras nuestra sesión de entrenamiento les ha cambiado la actitud por completo, y salen mucho más enérgicos y enérgicas.
¿Coinciden estos objetivos con los tuyos?
Tus sesiones se realizan en un espacio personal, individual y están enfocadas y planificadas par a tus necesidades de manera única e individual. Podrás entrenar desde una hora hasta cinco horas semanales, según el servicio que elijas y la disponiblidad de horarios.
Si quieres notar este cambio, el primer paso ya lo has dado.